miércoles, 26 de agosto de 2009

Nuevo triunfo de la droga

La Corte Suprema de Justicia de la Nación, se sacó un problema de encima.
Bien como dijo el miembro más viejo del grupo, el Dr. Fayt, "el poder judicial ya hizo lo suyo".
La droga en sus múltiples stransformaciones, ha dado un paso más en la sociedad argentina y el Estado nada hace para frenarla.
Ni el Estado, ni el gobierno, cualquiera que sea. Los problemas de Argentina son demasiados como para perder el tiempo en hacer una política contra el narcotráfico y además cumplirla.
Es mejor hacer obras públicas porque son las que se ven y no meter presos a los narcos, porque de eso poco rédito político se obtiene y además tampoco se les puede mostrar las caras.
Ahora cualquier persona que sea adicta, puede fumarse un porro donde le plazca.
Cualquier persona que porte un poco de marihuana, no será penada porque ya vendrán las interpretaciones de los abogados saca presos y de los jueces garantistas.
El negocio del narcotráfico ganó una nueva licitación en el mercado argentino.
Este es un país condenado, pero no al éxito como dijera Duhalde, está simplemente condenado.
Un país con una sociedad que pretende ser del primer mundo con mentalidad del cuarto mundo.
Un país con una clase dirigente que pregona la distribución de la riqueza, pero ellos no aflojan un solo mango.
Un país que se mantiene expectante para ver que partido de fútbol dan en cada canal de aire, mientras los chicos en el Norte se mueren de hambre.
Es un país condenado, en la medida que tengamos esa parsimonia para afrontar los problemas, siempre habrá quien saque ventajas.

lunes, 10 de agosto de 2009

Patovicas, barra bravas, bailantas

Unos son la razón de ser de los otros.
Quien es barra brava, o es patovica, son tipos violentos que acostumbran a actuar en patota para potenciar el poder de ataque.
Nunca se la bancan solos, porque son cobardes en esencia.
Cuando actuan contratados por un inescrupuloso dueño de bailanta, lo hacen sabiendo que gozarán de cierta impunidad.
En último caso del asesinato del chico que espera el colectivo, cerca de la bailanta, en Berisso, pone de manifiesto una vez más la falta de coordinación deliberada de las estructuras de control municipal y policial.
Esa bailanta, Alcatraz, idel nombre para un sitio lúgubre, no estaba habilitada y sin embargo la policía le brindaba protección.
El Ministerio de Trabajo de la Pcia. de Bs.As. no hacía controles, la Municipalidad tampoco, la policia, sólo le intereasaba pasar a "ver" como andaba la boletería.
Alcatraz no estaba habilitada y a pesar de eso abría sus puertas noches tras noches sin que se lo impidieran.
Alcatraz estaba inabilitada desde hacía 4 años y a pesar de estar ubicada a dos cuadras de la Municipalidad y a tres de la Comisaría de Berisso, continuaba abriendo sus puertas como sis tal cosa.
¿Quienes son responsables de este crimen?
1-El tipo que lo mató de un tiro de 9mm después de tirar a mansalva no menos de 8 tiros en diversas direcciones.
2-El dueño de la bailanta Alcatraz.
3-El Intendente de Berisso
4-El Director de habilitaciones de bailantas.
5-La Policía que no se preocupa en saber si el boliche está o no está habilitado para brindarle protección.
El orden no es excluyente.
El Sr. Gobernador Scioli, está muy preocupado por ver como alínea a la tropa peronista, mientras en la provincia de Buenos Aires ocurren toda clase de desmanes y en especial dentro y afuera de las innumerables bailantas que abren sus puertas todos los días en su distrito.

domingo, 2 de agosto de 2009

Jueces ineptos

Un Juez puede ser inepto por falta de actualización en los conocimientos jurídicos, poca lectura o nada de concurrencia a conferencias, etc.
También puede serlo por formar parte de una banda de delincuentes y él le cubre las espaldas junto a algún abogado, también delincuente.
Puede serlo estar enrolado en una corriente filosófica que choca contra una sociedad que claramente necesita otras soluciones para sentirse segura.
Todos los días hay noticias sobre crímenes cometidos por delincuentes que debieran estar presos pero lamentablemente están libres.
Todos los días hay noticias sobre delincuentes que cometen delitos estando en libertad anticipada o porque la justicia, lenta y paquidérmica, no actuó con prontitud y por tal razón, en aplicación de pactos internacionales, deben ser liberados.
La justicia es lenta por sí o porque obedece a un plan siniestro trazado por abogados inescrupulosos, que en complicidad con fiscales y jueces liberan a delincuentes, que sin dudas, tienen dinero para que la justicia mueva esas palancas favorablemente.
Yo creo que es lenta porque el sistema está agotado y debe ser modificado para adecuarlo a las necesidades de una sociedad que demanda justicia.
Sin embargo los abogados saca presos y los fiscales y jueces que tienen pocas ganas de trabajar o que reciben buenos emolumentos por hacer esos favores, se aprovechan del sistema caduco.
Ejemplo: Un delincuente es procesado por robo. Durante el tiempo que lleva el proceso, por diferentes razones, éste se dilata y pasan más de dos años. El delincuente entonces es liberado por haber estado dos años procesado sin sentencia. Durante ese tiempo el delincuente comete otro delito y vuelve a ser detenido. Esta nueva acción delictiva no es considerada reincidencia, lo que le aumentaría la pena del nuevo delito, porque como no tiene sentencia no puede haber reincidencia. ¿Que tal?
Otro caso similar es cuando estando sentenciado, la sentencia no está firme y entonces tiene las mismas características que el caso anterior. Si por "buena conducta" es liberado antes y comete un nuevo delito tampoco es reincidente. ¿Que tal?
Entonces de nada sirve que las penas sean de 500 años de prisión. Tampoco la pena de muerte es útil, está demostrado en EEUU. Diferente es en países islámicos o asiáticos donde el tipo que es condenado a muerte, es ejecutado sin más vueltas.
La solución, aunque parezca pedante de mi parte, pasa por:
1) modificar el código procesal.
2) relevar a los jueces que sueltan delincuentes.
3) publicar el nombre y apellido y el delito por el cual fue procesado, de las personas que salen por razones de buena conducta o por alguna razón técnica, antes que se cumpla su sentencia.
Esto ayuda a que los ciudadanos comunes, los que trabajamos y procuramos el bienestar de nuestras familias, podamos saber quien es el tipo que vive en el barrio y por lo tanto cuidarnos de él.